Reseña Interlatente de Abraham Arellano
Un tímido instructor de manejo se enamora de una chica sordomuda que cuida de un hombre ciego. Con tal de acercarse a ella, fingirá necesitar los servicios terapéuticos del hombre ciego, pero su obsesión llega lejos cuando descubre un grupo secreto de discapacitados que entreteje una conspiración por las callejuelas nocturnas de la urbe. Esa es la sinopsis de la cinta dirigida por Jaime Humberto Hermosillo en 1983. Egresado del Centro Universitario de Estudios Cinematográficos CUEC (ahora ENAC), el cineasta tapatío venía de dirigir películas como María de mi Corazón —coescrita con el genio Gabriel García Márquez—, Matinée, Naufragio y La Pasión Según Berenice, una de sus obras más conocidas, al igual que en el año 1985 dirigiría otra de sus obras más célebres: Doña Herlinda y su Hijo, considerada la primera película abiertamente homosexual en México.
Para El Corazón de la Noche, Hermosillo hace mancuerna con Gabriel Figueroa, uno de los cinefotógrafos más laureados de la historia del cine nacional, nutriendo al largometraje de una virtuosa puesta en cámara que llena la pantalla de un aura misteriosa y surrealista con tintes de cine negro. La trama, cimentada en el thriller, es generosamente nutrida por los atributos anteriormente mencionados, cogiendo inspiración de maestros como Hitchcock.
Aunado a los actores protagonistas, las personas discapacitadas juegan un rol coral que potencia las situaciones que se pondrán en juego durante la duración del filme, desembocando en un juego de misterio que absorberá a los protagonistas hasta niveles inimaginables.
La atención al detalle está presente a lo largo de la hora con cuarenta y ocho minutos, pero conforme el suspenso crece, las pequeñas cosas construyen un ambiente enigmático; ya sea un cigarrillo encendido o una persecución de vida o muerte, la cinta jugará con nosotros al mismo tiempo que nuestros protagonistas se ven envueltos en las consecuencias de sus actos.
Las actuaciones no son de reprochar; Jaime Hermosillo dirige de manera efectiva a su talento dotando a la cinta con situaciones inquietantes y de gran suspenso, de la mano de actores de gran calibre como lo es Pedro Armendáriz Jr.
Así como lo haría a lo largo de su demás filmografía, Jaime Humberto Hermosillo toca la sensualidad y el erotismo, pero esta vez trazando la vulnerabilidad humana a lo largo de varias escenas culminando en un final indefenso. Un romance que poco a poco desemboca en una conspiración, El Corazón de la Noche es un filme atípico que nutre la cinematografía nacional, uno de esos escasos productos que desentonan pero que muestran el potencial creativo que se esconde en las calles del país.
Interlatencias Revista
abril 2022